En situaciones de emergencia, cada segundo cuenta. Cuando circules por vialidades con dos carriles o más, recuerda que es tu responsabilidad facilitar el paso a las unidades de emergencia, como ambulancias, bomberos o patrullas. Orillarte de inmediato puede representar la diferencia entre la vida y la muerte para una persona que necesita ayuda urgente.
Muchas veces, los conductores no reaccionan a tiempo o desconocen cómo actuar ante el sonido de una sirena. La recomendación es clara: al escuchar una unidad de emergencia aproximarse, reduce la velocidad y oríllate con precaución, cediendo el paso de forma segura.
La colaboración ciudadana es vital para que los cuerpos de emergencia lleguen a su destino con rapidez. No bloquees el paso, no aceleres ni trates de ganarle al vehículo oficial. Una acción tan sencilla puede salvar vidas.